El ritmo diario se convierte en una constante restricción para asegurar una alimentación adecuada. La rutina agitada limita nuestra capacidad como adultos para mantener una buena alimentación, y esta misma dinámica es transmitida de generación en generación, de padres a hijos.
Los alimentos ultra procesados, como lo son: galletas empaquetadas y las cajitas de jugo para las meriendas, se convierten en soluciones rápidas a las que muchos padres recurren debido a sus apretados horarios. Sin embargo, en ocasiones, pasan por alto la importancia de concentrarse en la nutrición “un platillo a la vez”.
Aunque podría parecer que la importancia de la nutrición es evidente y que todos deberían comprender su relevancia durante los primeros años de vida, la realidad es que el ajetreo cotidiano influye en las elecciones alimentarias, desde las loncheras de los niños hasta la cena.
La Importancia de Cuestionar Hábitos
¿Qué comemos?
En el libro de la Dra. Elisa Zied, se nos insta a cuestionar las tradiciones y hábitos de consumo al recurrir a fuentes confiables. Aunque las generaciones pasadas pueden ofrecer consejos valiosos, y estemos muy acostumbrados a hacerlo “de esa manera”, es importante contrastar lo que hacemos con información actualizada, proporcionada por expertos en nutrición.
Muchas veces la información de fuentes confiables, es pasada por alto, y los padres olvidan que lo que consumen los niños no solo fomenta el crecimiento físico, sino que también influye en el desarrollo cerebral y en la predisposición a ciertas enfermedades en la adultez.
Tanto autores como la Dra. Zeid y el Dr. William Sears nos guían hacia una alimentación balanceada, rica en nutrientes esenciales. Ellos, junto con muchos otros autores, indican la importancia de la introducción temprana de una variedad de alimentos saludables para ayudar a los niños a desarrollar el paladar y promover buenos hábitos alimentarios desde temprana edad. Siguiendo sus consejos, podemos alejarnos de la trampa de la comida rápida y la conveniencia, y en su lugar, cultivar un amor por los alimentos frescos y nutritivos.
Nutriendo el Futuro
Como profesionales de la salud, podemos alentar a los padres a cuestionar si sus acciones son lo mejor para sus hijos. La constante influencia de la publicidad, dificulta en gran medida la oportunidad de criar a niños que no se sientan tentados por la comida rápida, las frituras y la “comida reconfortante” desde temprana edad.
En un mundo saturado de información, es esencial cuestionar las creencias y tradiciones, especialmente cuando se trata de la salud y nutrición de los más pequeños. La orientación proporcionada por expertos como la Dra. Elisa Zied y el Dr. William Sears es un pequeño extracto del conocimiento necesario para tomar decisiones informadas y alimentarnos adecuadamente. Como profesionales de la salud, es nuestra responsabilidad compartir este conocimiento con la mayor cantidad de personas posible, ya que desconocemos qué información están manejando en sus hogares.
Aunque esta información puede parecer “obvia”, al apoyar estas interrogantes y con el ejemplo, podemos romper con la desinformación y las rutinas que empobrecen gradualmente la alimentación de la población. En su lugar, debemos fomentar una cultura alimentaria que priorice la salud y el bienestar de la infancia de nuestro país desde una edad temprana.
¿Y tú, que trajiste de merienda?
Fuentes:
Feed Your Family Right! How to Make Smart Food and Fitness Choices for a Healthy Lifestyle. by Elisa Zied M.S. R.D. (Author), Ruth Winter M.S. (Author).
The Family Nutrition Book: Everything You Need to Know About Feeding Your Children – From Birth through A
