¿Sientes un estrés prolongado, saturación constante, agotamiento físico y un estado de agotamiento emocional? Es posible que esté sufriendo de síndrome de burnout. Este síndrome es un trastorno adaptativo ocasionado por casos de estrés laboral crónico que a su vez produce ansiedad, reducción de la productividad laboral, fatiga, cambios de humor y desarraigo laboral.
Según un estudio de Mayo Clinic, el 44% de los profesionales de la salud han experimentado síntomas de burnout a lo largo de sus carreras y el 96% considera que éste es un problema real en el sector de la salud.
Las principales causas de burnout en personal de la salud están asociadas a largas jornadas de trabajo, falta de control, manejo de casos complicados y falta de balance vida-trabajo.
A pesar de esto, menos de la mitad de los profesionales que padecen de esta condición en algún punto de sus carreras decide tratarlo y buscar ayuda.
Por eso, te dejamos algunos consejos para tratar esta situación:
1. Desarrolla una estrategia de cuidado personal.
Tener una estrategia propia de cuidado personal es esencial para eliminar los síntomas del burnout. Reconocer que el resto de las facetas de tu vida aparte del trabajo requieren atención, tal como la familia, la comunidad, amistades y espiritualidad, es un primer paso importante para moverse fuera del sentimiento de desatención que produce este síndrome.
2. Modifica la forma en la que ves tu trabajo.
Una de las formas en las que puedes tratar los efectos del burnout es cambiar la forma en la que ves tu trabajo. Tratar de dar valor a lo que haces, centrarte en los aspectos que más te gusten de tu trabajo o en las cosas que disfrutas de tu ambiente laboral pueden ayudar a recuperar tu propósito y control sobre la situación.
3. Encuentra otras fuentes de satisfacción y felicidad.
Encontrar fuentes de felicidad y satisfacción fuera del trabajo pueden hacerte sentir cambios importantes en tu día a día. Cuando centramos nuestra energía en situaciones que nos desagradan, tendemos a ver el mundo desde esa perspectiva. Encontrar hobbies o aficiones, descubrir en qué otras cosas eres bueno y útil son parte de las cosas que puedes hacer para mejorar tu salud mental.
4. Establece límites.
En los ambientes laborales relacionados a la salud es común que se excedan los límites, especialmente cuando se trata de tiempo. Aprender a decir ‘No’ a las peticiones de tiempo, solicitudes de horas extra o atención adicional de pacientes establece límites en tu relación profesional con compañeros y directivos. Aunque es difícil en algunos casos, recuerda que decir que ‘No’ te permitirá tener más tiempo disponible para dedicarte a las cosas que realmente disfrutas y quieres hacer.
5. Utiliza técnicas de relajación.
Las técnicas de meditación como la respiración profunda y practicar disciplinas como el yoga, pilates o Tai Chi pueden ayudarle a combatir los efectos del burnout. Una práctica centrada en la liberación de las tensiones y atención a los pensamientos te harán sentir relajado y en paz.
6. Practica terapia basada en mindfulness.
El mindfulness es también una de las herramientas más poderosas para combatir el estrés y la ansiedad. Esta terapia busca que las personas mejoren sus capacidades de concentración en el momento presente, enfocando su energía y su atención en la autoconciencia y el autoconocimiento, generando mejoras en el bienestar y profesionalismo. La terapia del Mindfulness te permitirá desapegarte del sentimiento y la ansiedad que provoca el agotamiento, sin juzgar la situación.
7. Pide ayuda.
El burnout, como muchas otras situaciones que ponen en riesgo nuestra salud mental, pueden salirse de control si no se tratan a tiempo adecuadamente. Pedir ayuda a un especialista en salud mental es la mejor forma de abordar la situación cuando se siente que ya no se tiene el control.